omu

Cada paso fue embrión

 

 

Siendo padre
no abdico de ser hijo,
Al ser padre...
advierto el significado,
me reconozco como hijo,
y con mayor ahínco
quito los cebos,
desmonto anzuelos,
no reniego del origen
ni desestimo la busqueda,
hilando pensamientos con esencias,
hallo nuevos planetas,
forjo un paraíso.


Cuando el mar siega la siembra
y el cielo hambriento
sorbe y seca la humedad
y engulliendo la templanza

elimina la razón en esta tierra...
Los gestos pierden su audacia,
su inteligencia,
se tornan estáticos,
rebuznan tercos,
de construir rehusan,
gandules y esquivos
¡enmudecen!.


Y no queda más,
que reencontrar el dialogo,
desempolvar palabras,
que antes extraviadas,
ahora piden,
se propague el sentido.
Y ellas colaboran,
prenden antorchas y lámparas
para se cubran de luz
las tinieblas que empañaron
y con la ira y el odio vetaron
un sinfin de prodigios;
es así como la crispación (otrora comandante de un ejercito)
sea soldado desmantelando sus cuarteles.


Cuando huye
de su propia visión el arco iris (gira la esquina)
y hasta desaparecer se retuerce
desmembrando sus colores;
¡hasta perderse!
quedando sólo el peso de su sombra,
es entonces cuando los recuerdos de fe,
se reconstruyen,
de ausentes pasan a estar presentes,
y a la cruz se le ruega,
a Shiva, Arjuna o Ala,
al Sol como raíz,
Mahoma o Buda,
para de manera alguna
conseguir prospere de nuevo,
la frescura de la comprensión,
ya no queriendo, desestimando,
trampas y enredos;
telarañas,
desvaneciéndose desvios y duelos;
encrucijadas,
sincerándonos para se deshaga
la tensión de los nudos,
que asfixiantes ahogaban
y de tanto apriete negaban
que cada paso pudiera avanzar
para alcanzar sin evidenciar,
a la voluntad que portaba
aquellos sueños,
cuales ilusionando se necesitaban.


318-omu G.S. (bcn-2011)