alexei

NOCHE BRUMOSA.

Noche brumosa, donde se oye el canto,

de las cigarras, camino en tranquilidad,

solo observando, entre el paso sereno,

del  nublado errante en su eterno andar;

se agudiza el sentido del oído, en la paz.

 

Mientras observo el brillo tenue celeste,

en su fosforescente aparición ocasional,

sombras se encuentran  y desaparecen,

a través de los suaves vientos tropicales,

dejando entrever el recorrer peregrino.

 

Hoy mi corazón desfallecido y silencioso;

busca el consuelo de tus letras, distantes,

queriendo salir del océano atormentado;

luchando en medio del desierto ardiente,

naciendo en medio del sepulcro vetusto.

 

Buscando en medio de la obscuridad dada,

la farola que guie el paso pesado y triste,

del alma  vagabunda, al encuentro deseado,

del piélago escondido, en la tierra tropical,

oteando y observando el rayo consolador.

 

Pasa el tiempo y la búsqueda sigue no hallo,

el paso adecuado y la mirada se desfallece,

a la vereda maltrecha, a la irritación natura,

y la ceguera persigue aun con la instancia,

de la ilusión hoy perdida, de admirar tu alma.