IRMA PERIBAN VILLA

EL HOMBRE DE LA TERCERA EDAD

 

El hombre de la tercera edad,

tan solo su presencia,

me hace imaginar,

que siguiendo sus pasos

voy con El atrás.

 

El hombre de la tecera edad,

con derecho al respeto,

en condiciones de igualdad,

sus memorias retroceden en  el tiempo,

para no olvidar.

  

Se visualiza su historia,

su infinito recorrer,

en su lecho y solitario

 su sangre lo hace estremecer.

 

El hombre de la tercera  edad,

con ojos húmedos,

chispas plateadas,

barba semi-recortada

algo maltratada

y fuezas agotadas.

 

Piel  no tersa,

manos asperas y temblorosas

talones agrietados

descalzo, con huaraches o calzado,

fatigado de tanto trabajar.

 

EL hombre de la tercera edad,

a veces preocupado,

futuro incierto  a un costado,

con muchas ganas de llorar.

 

Sentado en el desván,

de compañero su bastón ,

con vista perdida,

pensamientos al vacío,

inclina su cabeza,

baja su mirar.

 

El hombre de la tercera edad,

con lúcidos momentos

ánimo de gran utilidad,

hasta que el momento ,

deno estar

tenga que llegar.

 

El hombre de la tercera edad 

Ejemplo tan notorio,

de muchos envoltorios

de éxitos, tropiezos y caídas,

que simplemente le enseñaron

pasos firmes  en la vida.

 

Ese hombre que hoy tratamos

invisible lo dejamos,

otras lo callamos,

de nuestro lado a ese viejo lo alejamos.

 

Vas bagando,

estorbo lo llamamos,

en otras ocaciones a un asilo lo llevamos.

 

Ese hombre sorprendente

que miramos diferente,

puede ser  un familiar,

o simplemente un remitente.

 

Con el alma entristecida

sus recuerdos son su vida

 encorvado e indefenso

con aliento agitado ya forzado,

quiere irse a descansar.

 

Ese hombre de la tercera edad,

ahora incomprendido,

tolerando y aceptando su destino,

se ha vuelto como un niño,

como un niño  al andar.

 

Sus pies no responden,

poco le  pueden ayudar,

quisiera que le salieran  alas

y el vuelo levantar.

 

la muerte y la vejez ,

no la podemos retardar,

en la enfermedad ,

se lucha para mitigar.

 

El hombre de la tercera edad,

en el tiempo ,

semillas  ha sembrado ,

trascendencia para recordar.

 

AUTOR: IRMA PERIBAN VILLA...MEXICO