Andrés Mª

EL NECTAR DE MIS CARICIAS

Las riberas de mi vida,

regadas por aguas turbias,

reverdecen a tu paso

y mil colores anuncian.

Aguas claras, cristalinas,

son tus miradas, mujer,

donde reflejas tu alma,

que me hace a mí enloquecer.

Has inundado mis campos

con tu sonrisa de niña

y el árbol viejo revive

en primaveras floridas.

Y a ti te llama y reclama

para ofrecerte sus brazos,

que vestidos de ilusión

te darán sombra y abrazos.

En mi tronco encontrarás

la corteza de mi vida,

y en mi savia libarás

el néctar de mis caricias.

Haz de este tronco tu casa,

tienes madera de sobra…

que yo le pondré techumbre

con las tejas de la aurora.

Las noches serán eternas

en el calor de la lumbre,

y al alba te haré el amor…

hasta que el sol nos inunde.

 

(RESERVADOS TODOS LOS DERECHOS DE AUTOR)