ivan semilla

El poeta

Combina las palabras

cuidando su belleza, su sentido

realza el verbo, adorna el sustantivo

y se enamora a rabiar del predicado.

Oración tras oración busca las perlas

para un bello collar de sensaciones

y con piedras preciosas de emociones

enhebra cuentas que en el verso engarza.

Es su intención decir lo que le nazca

lo que surge de sí que lo apasiona

lo que perturba su alma o atesora

en su raíz, su sangre o sus venas.

Pinta el amor o envuelve alguna pena

en la metáfora sutil que lo distingue

denuncia en prosa el mal en tantas lenguas

como páginas componen sus poemas.

El poeta es constructor de sentimientos

de letras que en hermosa arquitectura

luce galante la flor de la cultura

que perfuma el corazón o cala el hueso.

Ama el papel, la pluma, las palabras

ama al que ama el mundo y lo mejora

tal vez en rima, quizás en disonancia

pero escribiéndole a la vida él la adora.

Ama la paz, la risa, la sustancia

que como sabia le viene de la fibra

y en el espíritu inquieto que le vibra

busca la sal de amor que le hace falta.