Antonia Ceada Acevedo

Aventurada mujer

Ay,  senil  y veterana tierra  de añejos parajes

¿dónde el  milagro que te devuelva    años, siglos?

Aventurera Mujer  salpicadita  de contrastes.

Ay, mi pequeña Europa contradictoria y fascinante.

Para ti quiero:

Grandes pechos que amamante

Al solitario ,al adoptado, al desnutrido

Que lloran por la condena  sin agravante

De unos justos injustos proveídos.

 

Libertad ; tasludiza ,verde y elegante

Para no tragar la cicuta de retorcidos,

Para besar sin miedos a los colindantes

Y fuera guerras...

¡bienvenidos, sean,  los heridos!

 

Horas de sol eternas y perseverantes

para cosechar alegría en jardines floridos

donde la  sonrisa del amante,

donde el honor, el temple y los latidos.

 

Entereza ,firmeza, figura y plante

Sosteniendo tantos vocablos esparcidos.

Madura , Coqueta, roja e insinuante

Enamorando más a tus maridos.

 

España, te quiero feliz y radiante

Laboriosa, cuidadosa con tus paridos.

Te quiero, agradecida  y prestante.

Te quiero a pesar de “pocas nueces

Y muchos, muchos  ruidos”.

 

Antonia Ceada Acevedo