Este manojo de flores
que dejas en la puerta
me habla de indicios,
los pétalos de las rosas
son gotitas de sangre
de corazones puros
que se secan al sol.
Las margaritas deshojadas
destiñen el color del oro
sobre mis manos vacias,
anillos refulgentes
entre mis flacos dedos.
Las orquideas son etéreas,
su belleza extraña atrae
las abejas carnívoras
que rondan taciturnas
en perezoso vuelo.
Los claveles tiene espinas
le han podado el abolengo,
huelen a ferias pueblerinas
y doncellas sin mancillar
esperando en el parque.
Las flores negras ocultas
dejan ver sus rizos entre lazos
como crespones fúnebres
anunciando noticias...
quizás buenas noticias.
Este manojo de flores
trae sorpresas...
me habla de indicios...
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