adolfo casas c

AUTO RADIOGRAFIA(parte 1)

En los sueños estridentes de mi mente

hoy veo al cielo divagando complaciente

entre días vividos como presente

que no se viven nunca eternamente,

días de ayer días de antaño en mi mente exigente

sigue en  diáfanos sueño creciente,

que pone a flote el velero plácidamente 

que a la mar se adentra muy lentamente,

entre oleajes relajantes de la mente

empieza el viaje de la infancia de este escribiente.

.

En los momentos tempranos de mis días

la caricia de la brisa que estremece todavía

días de sol días de lluvia pero fueron tan míos como siempre,

explorando el campo, viajando en el monte

transcurrieron los días entre alimañas

tarántulas, escorpiones, vivoras y hormigas

que fueron juguetes de la infancia mía,

expediciones de sueños hermosos para mis días,

en fiestas el mas solitario del grupo ente gente pero solo

por ser diferente en conciencia y de hábitos de amistad sincera 

de inventiva loca de jugar a ser electricista y electrónico 

loco que se hecho a nadar sin saber flotar

domador de bichos y serpientes que infancia tan elocuente

que miedo dirían muchos yo solo vivía como pez en el río.

.

Cigarras música del recuerdo

atadas a un cordel mi mente de infante volaba 

a jugar al alpinista sin haber trepado un arista

mucho mas un vertical tan alto

a mas de 300 metros de altura

como nube en ladera el viento soplaba 

mi alma fue libre por ser yo en mi esencia pura,

que fue aventura mas que demencia en las alturas,

entre dorados maizales zurcí  mis recuerdos

ríos de arenales donde deje mis huellas borrarse en sendos pastizales 

mi primer trabajo oficial, de bombero a los 15

mi primer sueldo aun lo conservo 

y ya han pasado mas de 19 años

que dirán que desperdicio guardar unas cuantas monedas

peor lo pensaron mis compañeros

al ver que lo invertí en un libro diccionario 

que me costo una quincena de salario

joven mas que extraño comprar un libro 

ver semejante persona extraña a su edad

pero seguí siendo yo en esencia y mente,

es un libro que hasta hoy conservo

de escuela no tuve mucho o tal vez demasiada,

de primaria un tablón fue mi banco y unos tabiques en alto 

parte de mi pupitre diario,

cuando tuve suerte fue un salón con cuarto, quinto y sexto con un maestro,

cuando sentí que iba a quedar en el olvido llegue a secundaria 

que gran alivio ¡ que paso ! ¡ otra vez lo mismo ! en una casa de salón 

un pupitre sin apoyo o sin asiento 

un maestro de aviador jugador de fútbol que nos dio español

solo verbos y sustantivos.

.

la escuela mas grande me la dio la vida

en el campo, en el monte y en la brisa

no creo llegar a ser grande pero de lo que estoy seguro

es que fui yo en todo momento con mi esencia, mi lamento y mi sonrisa,

que mas de uno me vio la cara pero que importa

siempre fui el mismo con mi mano hacia el frente

siempre amigo siempre consiente

de alma viajera e imaginación entera,

que deparaba el destino viajando al campo y del campo a la ciudad

viajero errante tan solo en el monte en la sierra y en el campo

momentos de soledad que me enseñaron de mas,

a escuchar el viento el naciente silencio en latidos del corazón

el abucheo del río que fue un suspiro de sueños fluidos

tierra mojada que de dicha me inundaba,

tiempos sin tiempos desde el amanecer al alba 

siempre fue placentero despertar dentro del sueño

manipulación completa fantasía lograda,

volando despierto recorriendo lugares complejos

lugares de paz centro del alma y de mi universo.

.

tal vez sea poco tal vez sea mucho solo vago, solo escucho 

los pasos después de la cama y el comienzo de un nuevo día 

esbozando con tiza y coloreando con acuarela el bello velo de la vida.