ANMAR

Cada vez que vienes a mí...

Cada vez que vienes a mí,
es un génesis…
un amanecer distinto,
donde vuelan pájaros alegres,
y su trinar es invicto,
donde corren  mariposas,
para posarse en tus labios
donde la rosa …
baila entre tus manos.
 
Cada vez que vienes a mí.
se despierta…
el balcón adormecido,
al  atisbar tu cándida silueta
tras el enigmático cristal
de mi ventana.
 
Cada vez que vienes a mí,
el viento no escucha razones…
rompiendo el silencio delicadamente
con tan solo el roce la brisa enamorada.
 
 
Cada vez que vienes  a mí
se encandila mi alma…
arde el fuego de mi corazón
que te atrapa…
con su flama
para que no te vayas nunca de mi lado.