Claire

CANCIÓN SUBTERRÁNEA

 

 

Dispersa luces redondas y familiares el aroma de jengibre y canela.

El mágico perfume de la luna. Vapor amarillo y cálido.

Melancolía instintiva, lágrima inconsciente.

Infusión que se mezcla a la mañana, a gestos cotidianos, a tu mirada,

Y a un cielo de palabras y de momentos.

Se me cae sobre el alma un pensamiento y acaricio el borde tibio del alba.

Me envuelve una sonrisa imprecisa y la necesitad de una costumbre.

¿Qué será de este golpe de luz que se pierde en la esquina del tiempo?

¿Y de un invierno sin fotografías?

Te lo decía en un recuerdo, en un sueño, en algo cierto.

Lo escribí en el idioma del viento, en la ribera y en la espesura de mis horas.

Lo grité en el frío violento de mis manos. En un susurro lo grité. En un reflejo.

He callado todo el mar, todo mi cuarto, toda la esquina esquiva que mi reloj recalca.

Y sin embargo todo queda ahí, bajo este cielo sugerente  - hipnótico -


Últimas razones, ahogadas en oceanos de hojarascas.

 Lejano regusto agridulce, color canela.