enmanuelmundo

me aferre...

Me aferre a ti,

Como el alga a la corriente del rio,

Como  las estrellas a la noche,

Y fue frio,  el silencio,

Largo el tiempo de tu ausencia, que te busque,

Te llame, y dije al viento tu nombre para que tocara tu oído,

Me aferre a ti, sin condición,

Fue como dejar mi arsenal de guerras ganadas,

Y atarme al amor, sin circunstancias que me limitaran…

Ahora me ves aquí…

Como un rey, que ha perdido su reino, sino estás tú,

Como un pensador sin sus libros de reflexión,

Como un campesino, sin tierra donde cultivar…

Me veras libre como un ave en el campo,

Pero es más fácil desatarse de  la soga humana,

Que caminar en solitario atado a tu recuerdo.

Me aferre a ti,

Como el canto, al sonido de una guitara,

Como mi verso  queriendo tocar a tu puerta cerrada,

Como un ancla a su velero,

Como un árbol, a la tierra dura y estéril.

Solo fui el eco que grito tu nombre,

Y tú fuiste las montañas  donde se perdió mi voz.

Fuiste como esas estrellas fugaces

Pasaste por mi instancia de forma inesperada,

Queriendo un poco de esa belleza, y calor

Me ate a tu cintura, galopando en la noche a pelo,

Para que alumbraras al paso,  un poco de mi vida,

Pero quede atrapado en tu energía de mujer sincera,

De niña nocturna  en noches de desvelo, siempre fuiste mi lucero,

Mi pluma y papel  que grabo mis ideas.

Mis pensamientos con ímpetus de  entrar en tu conciencia;

Pero fueron vacías, como animal relinche para escapar…

Siempre…  volvía al mismo lugar,

Mis movimientos fueron constantes en toda dirección,

Para quedar atado a tu sombra, a tu estilo y corazón.