Virtus.D

EN MEMORIA DE MI PRIMER AMOR

¡Oh! Amor, vienes a mi memoria en esta noche de lluvia;

siento y veo aquel descenso desde la escuela a tu casa,

tu mano era caricia al refugiarse en la mía,

corazones de diez años en inocente alegría.

Aprendimos a escribir, para escribirnos…  “te quiero”.

Cuando de ti me arrancaron quedó en el aire “hasta luego”,

y al encontrarnos de nuevo,  tú estabas comprometida

con quién fue mejor amigo,

y nos cruzamos miradas de sumisión al Destino.

Destino ensañado en ti que arrebató tu hermosura

en la flor de tu vivencia tan sensible, noble y pura.

El otro día tomé fino Jerez con mi amigo,

tu nombre no fue palabras,

sino emoción del camino donde cruzamos miradas,

y sin saberlo, supimos que en nuestro llanto los dos

a tu imagen recurrimos.