Pablo Diaz

Perdone usted

Todo pasa por el tiempo,

 todo tiene movimiento; la

 vida y sus derivadas, el que

hacer de los inventos,

personas y pensamientos y,

él allí, invisible a simple

vista.

 

Es neutral;  no se queja ni se

 altera, no arremete contra

nada y, aunque no te lo

imagines, siempre te echa

una mirada… diciéndote, sin

palabras, aquí te estoy

esperando.

 

Tan sabio como él no hay

 quien, aunque lo quieran

hacer; es paciente e

indulgente, aunque, muy

intransigente con predestino

marcado.

 

Es nunca y siempre,

todo y nada.

Sin Favor de lengua,

 habla con bastante

elocuencia y, en esas

 conferencias, no valen

 escondidillas.

 

No hay diversidad de

 tiempo; ni viejo, ni

prematuro, ni absurdo,

 ni tolerante… sólo es este,

el eterno e invencible,

 la hechura especial

de Dios.

     

PABEDIZ…