joaquin Méndez

Gemidos por pasos dobles

Anoche yo  te soñé

y mil veces desperté

Soñé que tú me besabas

y acariciabas mi piel.

 

Me convertí

en un torero

para trabajarte bien

yo te hice tal fana

que al colchón  puse de pie.


Te di largas de rodilla

con mi lengua en tu hendidura

al escuchar tus gemidos

te a garre por la cintura

rozaron  mi taleguilla

tus pezones puntiagudos

y sentí cierto esconzó

al con tastó de tus pechos

que con fuego me que marón

esos pezones tan duros.


Te di dos pases de pecho

a los que bien me arrime

y gritamos los dos  juntos

al quemarse nuestra piel.


Redondos estatuillas

manoletinas y más

cuando te clave la espada

a la hora de matar

te pusiste de rodilla

te envestí por el trasero

te puse una banderilla

que aplaudiron los floreros

y al clavarte bien mi estoque

buscaste el burladero

a la alegría de mis toques.


El silencio se rompió

gemidos por pasos dobles

y las palmas de mis manos

en tus muslos mil redobles

me galopaste frenética

con tu melena

 a los vientos

y di dos vueltas al ruedo

casi sin conocimiento.


Después cabalgamos juntos

al unisonó en montera

empecé a regar tu flor

como lluvia

en primavera

me aplaudías

con tus besos

pues te gusto mi faena

mientras mi rabo

explotaba

bien metido

entre tus piernas.

 

Autor. Joaquín Méndez.

Reservado todos los derechos

21/06/11.