LUCERO DEL ALBA

¡Oh, Padre bendito!

Hombre sabio y genuino, ¡Oh! Padre bendito

Hoy abro mi corazón para expresar lo que siento,

Hoy quiero decirte lo mucho que te quiero,

Hoy alzo mis ojos al cielo para rogar por ti.

 

Hombre sabio y genuino, ¡Oh! padre bendito,

Tus pasos firmes me enseñaron el camino correcto,

Tu amor inmensurable selló mi corazón humilde,

Tus consejos eternos los llevo muy dentro de mí,

 

Hombre sabio y genuino, ¡Oh! padre bendito,

Tus brazos tomaron mi hombro cuando los necesité,

Tus ojos se nublaron cuando en sombras me vi,

Tu alma llora cuando siente mi desolación.

 

Hombre sabio y genuino, ¡Oh! Padre bendito,

Que el Todopoderoso derrame su bendición sobre ti,

Que tu corazón rebose de alegría y sea engrandecido.

Que tus días se alarguen y de él siempre fluya amor inefable.