ANMAR

¡Anoche!...

¡Anoche!...
Al sentir tus manos
que sostenían…
 las mías,
detuve mis andares,
recosté mi alma
entre tus brazos
y sobre tus hombros…
fue cayendo cada lagrima
que de mis ojos nacía
era  un rio…
de dolor y de fatigas,
que con tu amor…bebías.
hasta agotarlo…
y a cambio recibía
una lluvia de alegrías.
¡anoche ¡…
con  tus dedos en mi pelo,
entretejías… tus caricias
y mi sentir amanecía
aspirando de tu pecho,
sensaciones de armonía
irresistiblemente…
bailó mi corazón
al compas
de las velas encendidas,
al escuchar la melodía
de tu aliento.