Son días de luto para el hombre
Que cada vez se queda más solo
Sin la sombra de Dios.
Se están acabando
Como lobos hambrientos
Devorándose un pedazo de carne
Del ciervo muerto.
Son lunas sin estrellas
Que están por venir.
El mundo esta en las tinieblas
Ante la soberbia del príncipe del mal.
Son largas las horas
Y poco duran los días.
No se han querido arrepentir
Viviendo y gozando su pecado
Se siguen consumiendo
En su inmundicia y su crueldad
Pocos son los arrepentidos
Grande es el rebaño.
Nunca me buscan, como el hijo fiel
Busca a su padre amado.
El hombre esta confundido
Como cuando vende,
Su alma al diablo.
Se marean de mentiras
Y de falsos santos.
Pobres “ilusos” Morirán en su engaño.
Serán marcados con el hierro
Como Caín fue errado y desterrado
Por haber matado a su Hermano.
Ustedes Hombres insensatos y necios
Cargaran su cruz
Y serán juzgados por sus propios actos.
Unos dirán
Que la verdad de Dios existe
En cartas y en manos,
Pero hay ciegos que encaminan a ciegos
Y los llevan directo al crujir de dientes, al dolor y al llanto.
Que rezan por sus bienes
Y no se preocupa
Por rezar por su alma.
Todo lo que tengan
Se le quitara y desnudos ante su presencia así se QUEDARAN
En estos últimos días
Hasta el más santo de los santos
Pecara.
Serán tocados por Satanás y más de
Alguno CAERA.
Otros con la bendición del Señor
Jamás, Jamas...se marchitarán.
La prueba esta lista
Serán llamados ante Dios,
Como buenos guardianes esperando
La llegada, del Armagedón
No te duerma Hermano, no te duermas,
Vive intensamente en la oración
Y busca la salvación de tus pecados
De todo, de todo CORAZON.