MARÍA DEL MAR

ILUSIONES

 

De allá, de donde moran los poetas.

Donde ensalza la luna lo sublime.

Donde acusa el sentido lo imposible;

vestida en trasparentes…

Alma inquieta.

Llegaste retocando la silueta

al más agreste y ruin de los mastines.

Y tu mano calmó lo más punible.

Y tu boca templó las bayonetas.

 

De blanco, revestida cual paloma,

llegaste, PAZ, a un mundo derruido

y el flanco de tus alas fue mi nido;

laureles engarzaron tu corona...

 

Que triste despertar hoy he tenido,

pues todo ha sido un sueño, una quimera

y todo sigue igual... Siguen las guerras,

los maltratos, el hambre y los gemidos.

 

Quiero dormirme, luna, en tu regazo

y envolverme otra vez de fantasía,

y soñar que en el mundo la utopía

se teje acompasando los milagros.

 

Quiero ser “bella durmiente” en la tierra

y me despierte un “príncipe encantado”

con su beso de PAZ como regalo

de un aura ya impoluta en mi planeta.