El buscador de suenios rotos
Particulas muertas
¿Por qué fueron tus cielos negros?
Negros, oscuros y malditos
¿Por qué cayeron las partículas?
¡Exprimidas, enloquecidas!
Tus ojos verdes se envolvieron
en fríos, distantes, amargos,
Y despectivas tus miradas.
Tus labios helados y pálidos
sin ese calor, sin sonrisa
y un rictus en tu boca queda,
vacía sin sustancia ni agua.
Solo tú ajada piel perdida,
y deslucida, desgarrada.
Aquel día entre las tormentas
se fundieron luces azules
se destrozaban los amores,
y las sombras nos atacaban.
Tú con ajamiento letal
caminabas ensombrecida,
por las anemias de este mundo
mirando sin la lucidez
que algún pasado fue mejor.
Ahora se está marchitando
este futuro sin destino.
Pues el camino va muriendo
y se agrietan las tierras mudas,
y los úteros se desprenden
de las grutas supervivientes