FELINA

UNA VEZ MIRÉ TUS OJOS Y TE DIJE QUE TE AMABA

Una vez miré tus ojos

 

y te dije que te amaba

 

Hoy miro esos mismos ojos

 

y estoy más enamorada.

 

Llegaste a mí como el suspiro

 

que en el viento viajaba

 

Llegaste a mí en el momento

 

que mi alma se marchitaba.

 

La regaste con el rocío

 

que de tu corazón manaba

 

La acariciaste con hálito

 

perfumado de tu aliento.

 

Me dijiste yo me quedo

 

tan sólo un momento

 

Me diste tus caricias,

 

me contagiaste de tu risa,

 

me diste tu ternura

 

tan suave como la brisa,

 

me diste la dulzura

 

del cáliz de tu boca.

 

Me dijiste quiero amarte

 

y correspondí a tu entrega,

 

deseándote con lujuria,

 

queriéndote con locura.

 

Y desde entonces

 

se eternizó el momento,

 

quedándote en mi vida

 

sembrando el sentimiento,

 

quedándote fundido

 

en mi alma y pensamiento.

 

Felina.