Jose Luis Santiago

LOS MISERABLES

Cada uno saca de su corazón

aquello que tiene

y esta verdad da la razón

a Cristo que sus palabras contienen

enseñanzas que del mal nos previenen

 

Dios envía maestros

para guiar a las gentes

les da habilidad, los hace diestros

y con su ejemplo son convincentes

y elocuentemente concluyentes

 

el antiguo y nuevo testamento

el Coran y otros textos

en la verdad toman fundamento

que la religión no es el pretexto

para ensalzarse y salirse de su contexto

 

como base este preludio

y con exacta medida

desarrollare en el interludio

la mísera codicia desmedida

de los miserables de vida corrompida

 

os diré en primer lugar

que el amor no es fornicar

pero al repudiar y juzgar

sin piedad, se odia al predicar

y odiando el amor ha de abdicar

 

en segundo lugar os hablare

del mísero pordiosero

que engaña por placer

ya que por envidia es usurero

y la maldad es su consejero

 

esta tercera conclusión

es para la cobardía

que a la comodidad presta atención

y aliándose con la hipocresía

siempre justifica su falta de osadía

 

altanería, cobardía y usura

ciegan sutilmente

conduciendo a la locura

de la conjetura que estupidamente

justifica lo miserable, miserablemente

 

la valentía sin compasión

es en realidad pedantería

y la osada determinación

se ausenta de la cobardía

y con la verdadera justicia se alía

 

del alma sus enemigos

son los sentidos desbocados

la frustración es el castigo

que trae la ira que te deja alterado

y alborotado la inteligencia te ha abandonado

 

ganar o perder

es propio de la vida

es su natural acontecer

y entristecerse o alegrarse sin medida

nos aleja de la paz deseada y querida