Albin Lainez

trĂ¡nsito

 

 

destilo un sollozo

cautivo del letargo nacional

urde la mente recovecos

bursátiles y bolsa de empleos

sin aguinaldo que atenúen

la necesidad por consumir

 

cruzo a través del matadero

 

la metrópolis diaria abre fauces

para engullir todo futuro

y rumiar el propósito

de la existencia

ocurre hasta las seis de cada tarde

cuando los conscientes padecemos

ante un nuevo oscurecer yermo

en que algún insomne

y fétido tren nos devuelve a los barrios

donde ya somos forasteros.