Alexander Vortice

TRAS EL ARCÁNGEL

Incluso tras lo diabólico

se encuentran las virtudes

de un arcángel hecho

a imagen y semejanza

del amor.

 

Valiente se siente el hombre vacío

cuando el mal se posa en sus manos

y lo utiliza para despedazar el espíritu

de un ser benévolo; mas, en poco tiempo

regresa el fuego y con fuerza retuerce

su cuello de hombre acostumbrado

a asesinar.

 

Basta un ademán de pestañas

angelicales para retornar al blanco

que es color de cosmos relajado.