En tiempos en los que el hábito de la lectura es cosa de pocos y los precios de los libros hacen que no todos puedan acceder a obras novedosas, resulta interesante poner en marcha planes que fomenten el interés social por la literatura.
Los programas que buscan acercar a la gente a los materiales literarios no son una novedad porque ya se vienen implementando desde hace tiempo en numerosos países pero, de todas maneras, su puesta en marcha siempre genera expectativas y renueva la confianza en la promoción de una costumbre tan recomendable y saludable como lo es la de la lectura.
En la Ciudad de Buenos Aires, los habitantes tendrán a partir de ahora la posibilidad de beneficiarse con un plan piloto impulsado por el auditor porteño Alejandro Fernández que pretende provocar la curiosidad de los vecinos por medio de una especie de «búsqueda del tesoro».
En este caso, según trascendió, se distribuirán diez libros por distintos puntos de la ciudad para que puedan ser encontrados, leídos y «vueltos a perder» para que la cadena continúe y la mayor cantidad de personas posible pueda acceder al contenido de estos ejemplares que ofrecen información y fotografías de diversos monumentos y sitios históricos de Buenos Aires.
La propuesta, que se enmarca en el proyecto «Observando Buenos Aires», pretende promover la lectura pero también impulsar el compromiso de compartir y poner a prueba «el grado de honestidad que tiene el porteño», tal como expresó Fernández ante la prensa.
Ahora ya saben: si se encuentran en Buenos Aires y descubren en algún transporte, bar o espacio público un libro que aparenta estar sin dueño, tómenlo prestado, disfruten su contenido y, una vez que finalicen la lectura, escóndalo en otro rincón de la ciudad para que la cadena no se rompa y pueda sumar un nuevo participante.
Link relacionado:
https://afueravivianacanosa.blogspot.com/2009/12/proponen-perder-un-libro-para-que-otra.html
Debes estar registrad@ para poder comentar. Inicia sesión o Regístrate.