Que había cosas más importantes que vivir,
porque precisamente la muerte era el punto,
el punto de partida, y no la vida,
porque la vida es un momento, es un efímero tormento.
Y la tristeza no es exactamente un sentimiento,
es un recuento, una foto, o el cielo.
Y las memorias que escurren del reloj,
Ya no regresan para un nuevo amanecer.
Que se nos va el camino de los pies,
la felicidad de las manos,
y agudizando la noche taciturna,
en el querer del ser y del saber,
exhalamos y en un rostro surcado,
nos volvemos a perder...
porque precisamente la muerte era el punto,
el punto de partida, y no la vida,
porque la vida es un momento, es un efímero tormento.
Y la tristeza no es exactamente un sentimiento,
es un recuento, una foto, o el cielo.
Y las memorias que escurren del reloj,
Ya no regresan para un nuevo amanecer.
Que se nos va el camino de los pies,
la felicidad de las manos,
y agudizando la noche taciturna,
en el querer del ser y del saber,
exhalamos y en un rostro surcado,
nos volvemos a perder...
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Autor:
~LenoreHellsing (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 23 de septiembre de 2011 a las 21:20
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 64
- Usuarios favoritos de este poema: Alessita, ADOLFO CESAR MARCELLO.
Offline)
Comentarios1
lindo poema...
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