Aquellos amantes de la literatura que valoran y se sienten atraídos por la narrativa hispánica contemporánea, no deberían dejar de leer el contenido de «Terra nostra», un libro publicado en 1975 que, desde el punto de vista de muchos expertos, constituye «la novela más ambiciosa y compleja» del escritor mexicano Carlos Fuentes.
Gracias a este trabajo que el destacado exponente de la literatura mexicana enriqueció con numerosas referencias no sólo históricas sino también culturales (ya que, además de cuestiones vinculadas al pasado, hay espacio para la pintura, la mitología y la poesía, entre otras temáticas), en 1976 el autor nacido en la ciudad de Panamá el 11 de noviembre de 1928 ganó el Premio Xavier Villaurrutia y, un año después, fue distinguido con el Premio Rómulo Gallegos.
«Terra nostra», una obra muchas veces traducida y elogiada, es una interesante propuesta que pasea al lector por la España de los Reyes Católicos, describe la tierra de Felipe II, narra el absolutismo español de los Austrias y recuerda las estructuras verticales del poder que caracterizaron a la América española.
De todas formas, es importante destacar que esta creación de Carlos Fuentes no se limita a cautivar por medio de una novela inspirada en hechos reales, sino que intenta distinguirse del resto de las opciones que forman parte del género a través de la epifanía y la fundación, así como también por someter a crítica el concepto de relato.
Por sus características y la maestría con la que fue escrita, «Terra nostra» constituye una opción más que atractiva para comenzar a conocer en profundidad la labor de este autor que también ha generado admiración a nivel internacional por títulos como «La muerte de Artemio Cruz», «Agua quemada», «La frontera de cristal», «Cantar de ciegos» y «La región más transparente», por citar sólo algunos.
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