Manuel Palacios

Divorciada.

Perdón le pido señora,

que la tengo en mi soñar,

ha llegado la hora,

que me sepa perdonar.

Tus ojos dicen que sí,

aunque tus labios digan no,

tanto que te he pedido,

me diera tu corazón.

supe de tu divorcio,

de quien n te supo amar,

como me duele el silencio,

para mi amor expresar.

En silencio te amado,

y mi amor te lo entregué,

lástima que soy casado,

para hacerte esposa y mujer.

 

Por: Manuel Palacios.