La tome en mis brazos por vez primera,
se veía como un angel bajado del cielo,
para bendecirme con tal hermosura de ojos azules,
mejilla rosada y cabellos rubios,
tan solo de tenerla entre mis brazos la felicidad me embargaba,
al mirar su hermoso rostro agradeci a Dios,
Gracias por haberla traido al mundo Gracias por darme una hija tan linda
y dulce Gracias Dios Mio.