Graciela Dantes

EL ROPAVEJERO

 

 

¡ZAPATOS VIEJOS, ROPA  USADA  QUE VENDAN!

Asi gritaba el ropavejero, en un carrito de

dos ruedas de madera pesado y viejo.

Con sus dos manos lo empujaba,

 las amas de casa atentas estaban al

grito del ropavejero, cada semana.

 

Todo, lo viejo,  ropa juguetes,

al carro de madera iban  a dar, por unos

quintitos que en ése entonces algo costaban,

el trueque sea hacía, y la ama de casa

contenta estaba , pues en su alcancía,

 

más dinerito ella ahorraba.

Ya no hay el grito del ropa vejero,

Ya no hay el ahorro y mucho menos

quintitos, con cochinitos.

Sólo el recuerdo de la abuela,

 

que con alegría relata las cosas sencillas y

 bellas  que ella miraba, ahora, la ropa vieja

es  moda, y ¡vale mucho ¡ Entre más rota más

costosa.   

 

GRACIELA DANTES