alicia perez hernandez

ES UNA ESTUPIDEZ AMARTE…

ES UNA ESTUPIDEZ AMARTE…

Tengo vergüenza amarte, porque no te merezco, eres divino.

Tengo vergüenza amarte, por que tú eres un gran poeta,

Un hombre recto, gentil, educado, perfecto diría yo…

Eres un hombre ajeno, ella, siempre estará entre los dos.

Y yo me muero de celos, sabiéndote de otra, te quiero solo mío.

Eres el hombre que siempre he amado y deseado en mi piel,

en mis entrañas, deseo hacerte mío, solo mío, sin merecerte,

porque tú eres un príncipe, yo soy una vasalla,

Tú un ilustre poeta, yo ni siquiera sé rimas, soy una simple

mortal, amándote, deseándote como un barquillo de chocolate,

y como un algodón de azúcar, siendo toda tuya y haciéndote

mío, comiéndonos a besos y saboreándonos como fruta madura.

Amo, amarte, complacerte, conquistarte, enamorarte como en

Un cuento, ser tu princesa y tu mi príncipe, ser tu arena y tú mi playa,

Y amanecer desnudos en ella, ser eclipsé de sol y luna…

Tejer sueños en nubes de algodón, ver las estrellas todas las noches,  

Amanecer cobijada en tus brazos amorosos, abrazar abismos

llenos de pasiones, ver dragones cuando estemos muy apasionados.

Tenernos, sabernos, sentirnos en la piel y tener orgasmos a la luz de la luna.

Me da vergüenza amarte, tu tan divino, tan susurro de noche,

Tan tierno en tu mirada oculta, tan mío y tan de nadie,

Porque ya nadie te quiere, yo te voy amar toda la vida, aunque bien sé,

que tú, jamás me amaras, eres mi terrón de azúcar, mi isla paradisiaca,

Mi almuerzo en la cama, mi oscuro pasado y mi gloria presente.

Eres lo que siempre he querido de otras vidas, de espíritus de luz,

de ángeles caídos del cielo, por pecadores, tú sabes que se todo de ti,

Y por eso me gustas, porque en parte eres igual que yo, ¡Amor!

Pero tu en tu perfección eres inalcanzable para mí, eres como querer

alcanzar una estrella, amarte es mi pecado y mi vergüenza, tan simple,

Porque no te merezco, te he ofendido, molestado, perseguido, acosado,

Y pensar que todo lo he hecho por amor, no me disculpo, me avergüenzo!!

Pero en el corazón no se manda, yo no quise amarte, no sé ni cómo paso?

 ni por qué  tú, habiendo tantos hombres, ¿por qué tú?

Perdóname amor, ayúdame a morir en paz, no duermo tranquila, 

solo de ¿Pensar en ti, qué va a ser de ti, el día que yo me muera?

Pedazo de mi alma, ámame ahora, que tengo fuerzas para amarte.

No se como fue, pero te fui amando de menos a más, como un remolino

que fue creciendo, sin yo quererlo, te fui queriendo de menos a mas!!

Y ahora ya no sé cómo irme de tu vida? quiero no volver a pensarte jamás.

Eres como dulce, que se disfruta en la boca hasta el final, sigue delicioso.

¡Amarte así! Te fui amando de menos a más!! más y vivir sin ti no puedo,

siempre me he equivocado, no he sabido como amarte, como tú te lo mereces. 

Esta locura me va a acompañar hasta que me muera. ¡Amor!

 Disculpe usted mi estupidez!!

 

Alicia Pérez Hernández… México

No es la pluma la que escribe, es el alma

Todos los derechos reservados©