Dominatorque

El extraño de cada día

 

 

 

No llegará este lecho de fuego,

a saciarse completo de mis carnes,

no conocerá del hombre

el granito frío que me compone

el mar de sangre, que tanto me completa y rellena.

.

Porque fui como el sable, de hierro puro,

que al tocarte, silente se deshizo

sobre alfombras de suspiros,

albercas de palabras, de amor.único.

.

Porque fui verdugo, antes que poeta,

antes silencio, que reflejo en tus ojos,

me queda tu boca y su aliento

como único alimento,

en este mar infinito

de vidas intactas y solitarias.

.

No llegará el día ni la hora,

que consiga con mi última palabra,

poeta de continuas guerras,

convencer del todo a mi pecho,

de amor completo y supremo, si me coronas.

Pues serán las albas de cada noche extinta,

las que me laven y renazcan de nuevo,

para amarte, como un niño,

como un brote de rosal tierno,

como un desconocido,

que a tu puerta asoma

y su aldaba golpea,

cada vida,

cada instante …