Se adosó mi poesía
con una amiga llamada luna marina,
en una balsa agitada
por el oleaje de una playa marítima...
Cada ola rompía contra la arena
y todo era gana...
tan cerca del agua en ese sitio,
y tan cerca de tierra en ese momento...
Que sintieron una cosa bonita al minuto
y otra diferente al siguiente,
con un anillo de oro y un brazalete
dentro del mismo sueño y de otro cambiante...
Fue un poema de mi mente,
con amplia luz, ideado aquí entonces,
y en su título una simple frase,
\"el estar los dos juntos es suficiente\".