Lauti633

Sin espíritu

Me desvelo en el instante, mientras observo.
Solo imagino la inexistencia de palabras.
La anti poesía del verbo.

En las mañanas se extiende la madrugada,
los rayos de sol solo son reales, cuando uno los ve.
Pero mientras la luz no entre,
la noche todavía existe.

El tiempo se suspende en una irrealidad extensiva.
Nadie sabe mi secreto, ni mis preguntas.
La noche infinita no termina,
hasta que uno se dispone a terminarla.

Me hundo en el mensaje muerto.
En la oscilación constante del infierno.
En las nubes de la noche.

Donde toda contemplación es posible.
Donde soy libre, sin mi libertad.

Perdí el dilema poético que perseguía,
la dialéctica de las tríadas imposibles.
Mientras, me distraigo clasificando el infinito.
Catalogando los silencios.

Tu mudez es la pregunta que esquivo.
La estructura elemental sin respuesta.

Persigo la única verdad, con la constante excusa
de aferrarme a algo, pero en el camino
me distraigo con las imágenes de la trascendencia.

La única idea que tengo por el momento,
es la de ver todo lo que pueda:
cada forma del texto,
cada imagen en suspensión.

¿Dónde termina la contemplación?
¿Es posible encontrar la verdad
en la extrema pasividad?

¿El espectador es dueño de lo que ve?
¿O todo esto es el más sublime de los espejismos?