Cristian Tisselli

Ella vino a soñar mis perversiones suyas

Ella vino a soñar mis perversiones suyas

Cuero en el látigo picante penetrando profundo templó espada y hacha y seda para su mente blanca 

El cuerpo puro fluido grito roto de fuego eterno

Sangre rígida muy rígida estimulada abre su boca de pluma que escribe líneas sucias sentencias ejecutadas 

Mis palabras entraban y salían mojadas en carne viva y no hacían falta  

Se quemaban en la piel sosegada abierta violenta por placer   

Orgasmos ojos vi proyectando sueños de locura en cielorraso atravesado de fantasías viste todo

Doy sin abismarme sin límite en lo real soy otro soy ella para ella soy todos

Clave de freno desintegrada en el tiempo no te salva tierra dolores 

Los sueños suyos-míos seguirán soñando y nosotros

Acabaremos con ellos nunca