eduardo alberto maldonado

Casi igual


Mi semblante ya no es el mismo.
Interiormente sigo igual,
casi igual.
Externamente cambio,
lentamente, pero cambio.
Los surcos de los
pequeños pliegues de mi piel,
se acentúan más y más.
Se multiplican las blancas
hebras en mi cabello.
La espera apaciguada,
ya es superada por la ansiedad
de saber cómo será.
Me apoderaré de toda paciencia
que halle dando vueltas por allí.
Mis movimientos corporales,
no responden como antaño.
Mis pensamientos son
más meditados, incorruptibles...
Mis ideas son las únicas,
que continúan igual.