Diego Herlein

Reflejos de Cortázar

Con la vieja voz rasgada el viejo Bob

entona la canción aquella que luego

de algún ron, tabaco o vino

con su mano sudada

él ponía las notas

con su antigua ternura que los nombra

en la noche con las estrellas

ellos se ocultan  y aparecen perdidos

en la lámpara del destino

un día en la barca de la sombra

ellos se reflejan en la luna

y salen cuando se oculta el sol

con la frescura que los caracteriza

si  están muertos ellos te hablan al oído

si están vivos son mano tibio  y techo

y no te niegan una mano

entre tantas rayuelas

para arrojar la piedra

y que esta llegue a tu cielo.