Tania CasFer

A pleno pulmón

Respira, dijeron mis pulmones a punto de solaparse empujando con todas sus fuerzas. Y respiré, claro que lo hice,  respiré tan fuerte en medio de aquel bosque que mis pulmones se ensancharon dejando entrar un aire mentolado que te abre hasta los poros, te alinia el corazón en un pálpito directo al brillo ocular y tus heridas se vuelven simples marcas en la piel, suturándose a base de música y risa a media cerveza.
Allí estaba yo aquel día, resurgiendo entre las flores mientras escuchaba a Coldplay, sintiendo cada roce de mi cuerpo con la hierba mojada, con cada hoja que perdía el equilibrio y planeaba sobre mí.