clonariel

A LA ROSA

 

Abres para mi tu boca roja
en el jardín de la tarde,
entre fragancia y cielo
dulce nostalgia me nace.

 

Brisa, su corona aprietas
con tus manos incoloras,
y en el ímpetu fugaz
mi corazón de dicha goza.

 

Con tu vestido de sangre
y tu tallo magro
eres dama estremecida
por un beso abnegado.

 

Yo te canto rosa de ensueños,
como un cosmos infinito naces.
Beldad entre todas las flores,
sin principio ni fin, inalterable.