Tengo puesta ropa que nadie entiende,
que a veces ni hasta a mi me gusta
pero visualmente me queda bien, me convenzo.
Generalmente mi cara es seria,
de hecho mi sonrisa,
es lo que menos me seduce de mi cuerpo,
quiero que me vean como me gusto yo.
Vivo fantaseando romances con hombres que puedo estar,
y con mujeres que nunca tendré.
Deseando y deseando y no parece importarme,
total es costumbre.
Me gusta bailar,
pero no me gusta como me veo yo bailando,
siento la explosión masiva de sentimientos de los géneros,
lo vivo más como una cuestión corporal y de instinto selectivo (no cualquiera baila y siente instinto sexual).
Me gusta buscar con la mirada,
aunque esté evitando ponerme maquillaje,
considero que el rostro sin pintar te da más tiempo en la vida,
aunque maquillarte te quitara solo 10 minutos.
Me dicen que soy buena vendedora,
pero seria ideal que no existiera ni la compra ni la venta de nada,
es terrible saber hacer bien tantas cosas,
porque siempre te terminas cuestionando si realmente lo haces bien o no.
Igual me gustan las celebraciones,
cuando era chica se festejaban todas las fiestas,
con el tiempo te animas a conocer más a tus parientes,
preguntarles cosas aunque sea por diversión.
Estuve un tiempo alejada de mis pasiones,
y creo seguir estando por no tener una sola anclada en tierra firme, nunca.
Igual estoy acostumbrada,
la pasión personal se que no es lo único mejor de mí.
Me gustaría tener otras personalidades,
aunque yo sostengo que ese gusto es parte de un carácter inmortal,
algo que se que lo tengo yo.
Quiero saber si existen formulas para lograr ese super poder,
Las de cambian las dimensiones del alma,
cuantas veces sea necesario para conocerme.