Arsenio Uscanga

Me vienen ganas.

Me vienen ganas, de correr hasta tus brazos y estrecharte en un por siempre. De levantarme contigo al lado y susurrarte un \"buenos días\" todos los días del resto de mi vida y acompañarlo de un beso tan frágil que no lacere tus carnosos labios, pero con la suficiente fuerza para recordarte a lo largo del día lo mucho que te amo. De salir a correr por las mañanas, los dos, a tu pasito forzado, tras tus pies pequeños e inquietos y en las zancadas enormes que das en la vida, acelerar el paso.

Me vienen ganas de crecer, y arrancarme la camisa y todas aquellas prendas que me hacen sentir desnudo, y quedar desamparado ante la vida misma, en tu reparadora compañía. Me vienen ganas de tomarnos de la mano, y gritar: \"Sí, acepto\" Acepto la vida misma y todas sus inquietudes, las vicisitudes, los días de frío, los besos, el calor de tu compañía, expandir nuestros universos. De caminar entre calles empedradas de sitios desconocidos, y observar tu rostro sorprendido ante los nuevos atardeceres.

Me vienen ganas de todo, menos de olvido.