Wilkin Beltré De Oleo

El Destino

 

En un simple pestañeo del tiempo
la vida misma
abre la puerta
que hemos asegurado
con las mejores cerraduras;
sin preguntar a nadie
rompe el cerrojo
entra, cual propietario
remueve objetos
cambia de lugar a otros
y trae consigo
aquello que ella sí desea
que habite detrás de aquella puerta;
no usando siempre las mejores formas.

 

Es cuando nos hace pensar
que tal vez soñamos despiertos
o que en el mejor de los casos
no somos más que extraños
que tienen que actuar
conforme a un guión
de alguna novela
que ya alguien ha escrito
sin nuestro consentimiento.

 

¿Es acertado llamar a todo esto destino?

 

WBelDe
(Derechos Reservados)