gaston campano

/// Rincon senil /// ARREGLANDO A UNA REINA. ///

 

En mi taller de arreglos

donde la banqueta está en espera

No es una dama sincera,

pués se rompe a la primera.

 

La vestiré de brocato

verde bordado de azul

sería un desacato

no ponerle una cintita de tul.

 

En sus piernas delgadas

la barnizaré con color

así la haré afamada

ya que al verla es un primor.

 

El dueño quedará encantado

como quedó su reina ana

algo le había pasado

a esa reina sin ganas.

 

Me ha llegado una marqueza

en las mismas condiciones

tuve que agudizar mi destreza

para las seria peticiones.

 

Las costillas las tenía

bastante delicadas

porque en su trabajo sufría

la pesadez descarada.

 

Para hacerle el trabajo

y convencer al dueño

el precio algo rebajo

vaya bajando el sueño.