No pasó,
porque en mi mente quedaste,
como ese aire, como ese viento,
ese que estás en todas partes
y te hiciste dueño de mi,
amigo, confidente, mi amante,
más que todo en el mundo,
te di el valor
el que más aprecia el corazón,
de llevarte siempre en mi mente,
no pasaste como pasa cualquiera,
como esa nube viajera
que cambia su recorrido.
Fuiste y serás mi plato perfecto,
el más saboreado y el más preferido,
y me llené de tus manjares de sueño
y me llevaste a tus enterezas y anhelos,
me diste la calma y me diste tu amor,
uniéndolo entre todos mis locos desvelos.
Porque te sueño y no te veo pasar,
siempre te llevo en mi vida
como mi pena fundida,
que me perfora la piel
y me hace desangrar.
Tú eres mi vida, no la que pasó,
la que vivo en este presente,
dame toda esa pasión,
que tú llevas tan ardiente,
¡ y no te vayas aún!
¡no quiero verte pasar!
como ese ave tan hermoso
que sólo lo ves
y es tan rápido su vuelo,
que te quedas con las ganas,
¿por qué no te pudo amar
y no te contesta ni el mismo cielo?