… Y en la noche, desvelado, pensar y volver a pensar, si la muerte sería una opción que cortaría el sufrir de mi corazón, cuando lo que busco es paz para el alma …
syglesias
Presenta
El Rincón Oscuro del Amor:
Con una lágrima surcándome el rostro, me recuesto a la cama, no pudiendo predecir conciliando el sueño, si al caer la noche, seria la soledad quien sobre mi pecho de abrigo o podrías ser Tú, quien sorprendiéndome con un beso en los labios la apartes con tus manos de mi cuerpo, abrazando fuertemente lo que por derecho, te pertenece…
Con una lágrima surcándome el rostro, quedándome casi dormido, comienzan a surgir recuerdos cautivos que fueron nuestros momentos por detalles de amor, haciéndome ver el espejismo divino por desnudo de la mujer amada, contoneándose al abrirme los brazos, llamando al encuentro, juntando sus labios en un punto rojo…
Con una lágrima surcándome el rostro, despierto sudorosamente temblando, queriendo con mis brazos abrazarte para poder besarte, contemplando tristemente por un instante como tu anhelada figura ante mis propios ojos llorosos se iba desvaneciendo, sin darme ningún espacio de tiempo para adorarte, dejándome el corazón dolido…
Con una lágrima surcándome el rostro, juré en una oportunidad frente a un altar de Dios que no continuaría padeciendo a causa de tu desamor, apartado en un rincón oscuro de la casa, ocultándome de la mirada indiscreta de la gente, para que nadie pueda reírse al ver en mi rostro el reflejo sufrido de un alma clandestina, que pide libertad…
Con una lágrima surcándome el rostro, comienzo dolorosamente a evaluar, que si para lograr la paz perdida del alma, que desvela con llanto las ansias del corazón al atardecer, entonces, la muerte es una opción, cuando hasta ahora perdonar no ha podido ser nunca, la comprensión sincera y sentida por los dos, con el olvido de todo lo vivido.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 04/02/2016 07:20 AM.