Cecilio Navarro

Sin barbecho

Castillos en proyectos de discordia

de naipes que se caen con mirarlos.

Suspiros de profundas reflexiones

que aspiran el sentir de lo abreviado

con traca que despide a sus actores.

 

La niebla esconde el vicio que me atrae

con capas de tristeza y amargura

que oculta la verdad tan deleznable

y esquiva las miradas vagabundas.

 

Silencio que me envuelve en su textura

y encubre los estruendos adictivos

de gritos aberrantes de locura.

Me arrastran los espíritus malignos

que cierran las tinieblas apagando

la luz inteligente de mi alma

con pinzas que sostienen los diablos. 

 

Los humos de las lumbres me acarician

si apago los rescoldos del conflicto.

La niña cantarina de la silla

meciéndose y mirando con sonrisa

 de bruja envejecida por los siglos

que sabe que mis días son contados

y no queda barbecho ni baldío

al tiempo que se acerca, lo esperado. 

 

Cecilio  Navarro 17/10/2015

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