Kathe Morales

Carta a Mi Mejor Amiga! (...)

Extraño reírme de tus comentarios fuera de base, de tus chistes sin sentido, de tus caprichos de niña grande. Extraño acostarnos, en el colchón que te inventaste con sábanas y retazos de la tela de peluche de tu padre, y charlar acerca del amor, sobre sexo, de la vida o nuestro futuro… tomadas de las manos con fuerza, a puro corazón abierto. Me gustaría volver a retarte como una mama enfadada, y aconsejarte cuando te encuentras triste. Quiero volver a sentir lo que es tener una compañera: en las buenas, en las malas (y peores), en las escapadas, en las experiencias. 

Entre anhelo y sueños, nos hacíamos mimos en el pelo o sobre las manos. Nos contábamos temas profundos e irrepetibles, también fruncíamos el ceño,y hacíamos el reto que no nos riéramos por que la primera en soltar la risa perdía, antes de juntarnos a a comer siempre me tocaba llamarte ya que andabas perdiendo el tiempo y tu voz con un pendejo que no te valoro. Nos escapábamos de vez en cuando a caminar sin rumbo fijo, para despedir los malos ratos que vivíamos también extraño esos almuerzos plácidamente compartidos.
Entre gruñido y mentira, nos estamos alejando cada día mas.
Te extraño mucho, hermana mía, mi mejor amiga. Pero, a fin de cuentas… creo que extraño lo que éramos, lo que creí que eras y que existió pero ya no, te estas yendo a un lugar del cual muchos no salen con vida, el amor entre mentiras que crees, por estar ciegamente enamorada. (...)