Peregrina

INCIENSO

 

 

Las suaves ondas y espirales

 

del humo de mi incienso

 

se van entrelazando

 

con mis pensamientos;

 

se tornan invisibles

 

en su infinito viaje al cielo

 

con fragancia de poesía

 

se elevan al firmamento.

 

Abrázalas Dios mío

 

que allí mi amor te ofrendo,

 

ya no me queda más,

 

es todo lo que tengo.