samsamsa

No importa que pregunten

No importa que pregunten

Ni que digan

Ni que soy

 

Soy el desgarro del grito mudo

Que mira univoco con su único ojo

A la luz que se ufana gloriosa en el cielo

Mientras las tinieblas devastan los cuerpos inertes.

 

La carne consume carne

 Y el tiempo vanidoso hiede instantes

Corroe los indómitos mares que conforman el olvido

Y succiona el ajetreo diario

Del diario vivir, del diario comer.

 

Al final no hay gritos,

Ni ojos,

Ni luces,

Ni cuerpos inertes,

Ni carne,

Ni olvido

Al final no hay final

Sino principio

Otra vez el grito mudo que desgarró el olvido del tiempo mareado

 y corroído que succionó al diario vivir.