francisco de nerval

EL MUNDO CAMBIO DE LUGAR

 

 

Hace tiempo que el mundo cambió de lugar,

Mi fuego ya no quema,

tu sangre ya no arde,

el sol pide limosna de luz en una esquina,

las estrellas son viejos ovillos sin cielo,

los pájaros vuelan bajo las olas del mar.

En este lugar no existes,

eres como un nunca,

por eso debo inventarte

para que el amor regrese de la sepultura

donde lo enterramos

aquel día que el mundo cambió de lugar.