Oscar Castro Araya

NO APAGARÉ MI SONRISA.

Aunque todo se cubra de tienieblas

y no este seguro,

donde ha de tocar mi pie;

yo no apagaré mi sonrisa.

 

Aunque la boca amada,

que besé con unción,

alce ahora, al viento,

su voz de crítica;

Yo no apagaré mi sonrisa.

 

Aunque en el día de tu cumpleaños,

no pueda besar tu mejilla

-hijo mío -

Yo no apagaré mi sonrisa.

 

Porque mi sonrisa es la fé,

que me permite ver a través de las tinieblas,

porque mi sonrisa es la fé,

que perdona y ama.

 

Porque mi sonrisa es la fé,

de tenerte algún día,

junto a mí, hijo mío;

por eso :

     ¡ Yo no apagaré mi sonrisa !